¿Por qué hacer un doctorado?
Si eres uno de esos perfiles que siempre busca la excelencia y obtener grandes reconocimientos, es muy posible que te plantees el cursar un doctorado para alcanzar uno de tus objetivos a nivel profesional.
Es importante que tengas claro desde el principio que el nivel de deserción de los estudios doctorales son bastante altos, tan solo una tercera parte llegan a finalizar su tesis doctoral con éxito.
La primera pregunta que debes hacerte es: ¿Cuál es mi motivación para lograr titularme como doctor?
Este debe ser tu norte en todo momento. La persona que entra a estudiar no es la misma que se titula, ya que son muchos años de esfuerzo y dedicación. Eso sí, te podemos asegurar que la persona que sale, es mucho más disciplinada, enfocada y determinada.
El lograr hacerte con un doctorado requiere de un compromiso al 100%, mucha disciplina y energía. Tener claro tu objetivo, para que las adversidades que se presenten no te desanimen y hagan abandonar tu objetivo.
Te preguntarás: ¿Y por qué si es tan retador las personas se embarcan en este proyecto?
Por ambición.
Ambición a lograr una mejor posición económica, reconocimiento, demostrarse a uno mismo que sí se puede. Por aportar a la ciencia, economía y a la sociedad.
No todos están preparados para esta experiencia. Así que si tú eres una de esas personas que busca la excelencia académica, con apetito por la investigación y el aprendizaje en el campo de estudio, un PhD es para ti. Te recomendamos a la hora de tomar tu decisión, no olvides tener en cuenta las tendencias profesionales actuales.
Entre las ventajas es que al estar los titulados de doctorados más calificados, su inserción laboral es muy alta, y principalmente son buscados para ocupar puestos de alta responsabilidad. Esto se traduce en un mayor potencial de ingresos y seguridad laboral. El desempleo no es un problema para los graduados de doctorado.
¿Qué aspectos tomar en cuenta a la hora de decidir si un doctorado es lo que estás buscando?
● Familia. Tomar la decisión de hacerlo implica planear el resto de su vida
● Tu interior. Debes trabajar para ser una persona resiliente, con tolerancia al fracaso y a la frustración.
● Disciplina. Todo depende de ti y de cómo manejes tu tiempo y recursos.
● Objetivos. ¿Tienes definido el tema que te apasiona? Ten en cuenta que muchas veces terminarás investigando un tema diferente.
● Economía. Ten claro tus posibilidades financieras durante estos años, para tu manutención y la de tu proyecto.
Si has tomado en cuenta las implicaciones anteriores y le entusiasma la idea de alcanzar sus objetivos académicos, no lo piense más. Un doctorado no es para todo el mundo, es para que el gusta y las estadísticas lo confirman.
Población de los Estados Unidos en 2020, por nivel educativo (en miles)
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