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¿Cómo ayudar a reducir las diferencias de género?

La respuesta categórica es: con educación.

El mundo está volcado a reducir la desigualdad de género, de hecho, este punto, es parte de los 17 Objetivos de las Naciones Unidas para 2030.

Estas son algunas de las cifras acerca de la Desigualdad de Género presentadas en la web de la ONU:



Entre las metas de Las Naciones Unidas se encuentra una, muy clara, respecto a la tecnología y la educación: “Mejorar el uso de la tecnología instrumental, en particular la tecnología de la información y las comunicaciones, para promover el empoderamiento de las mujeres”.

Los datos:

Un estudi

o realizado por el Foro Económico Mundial, donde se destacan los siguientes hallazgos con respecto a la paridad de género: 1. Se estima que las mujeres tardarán 132 años en alcanzar la plena paridad con los hombres en el empleo, según el Informe Global de Brecha de Género 2022.

2. La importancia de proporcionar a las mujeres la educación y las habilidades que necesitan para volver a ingresar a la fuerza laboral es un paso crucial para acelerar la recuperación justa y equitativa de la pandemia.

3. Cómo igualar el campo de juego para las mujeres a través del aprendizaje en línea les ayudará a acceder a mejores oportunidades y posibilidades.

¡Buenas noticias!

La buena noticia es que la educación en línea está mejorando la inclusión de género en las áreas científicas, eliminando las barreras para las estudiantes y cerrando las desigualdades de género en la educación.

Las mujeres se están educando para ocupaciones en demanda en la economía digital.

La participación de las mujeres que aprenden en línea ha aumentado significativamente y está comenzando a igualar la participación de los hombres en muchos países, según datos globales de Coursera en el Informe Global de Brecha de Género 2022. De hecho, la cantidad de mujeres que aprenden en línea aumentó del 38% en 2019 al 45% en 2021, incluso cuando la brecha de género en el empleo se amplió.



Mujeres y aprendizaje en línea en mercados emergentes, un nuevo documento creado por IFC (Grupo del Banco Mundial) en asociación con Coursera y la Comisión Europea, contiene estas ideas intrigantes y esclarecedoras.

Más evidencia del estudio que confirma la superioridad del aprendizaje en línea incluye lo siguiente:

Según una investigación de IFC, el 45 % de las mujeres y el 60 % de los cuidadores en los países pobres indicaron que habrían tenido que retrasar o abandonar la educación si el aprendizaje en línea no fuera una opción.

Las finanzas surgieron como un obstáculo importante para las mujeres en el estudio de las estudiantes, colocando a casi la mitad de ellas en el percentil 50 más bajo de ingresos en su nación. Esto destaca la necesidad de un aprendizaje accesible para promover resultados justos.

Los modelos de aprendizaje en línea, que aprovechan la tecnología y tienen costos de entrega más baratos gracias a la expansión de la conectividad de banda ancha, están ayudando a llegar a mujeres que antes eran inalcanzables.

La tecnología está ayudando a disminuir la desigualdad de Género, no a la velocidad que nos gustaría, pero si tendiendo puentes hacia el objetivo.